Chapter Capítulo 60
Capitulo 60
Eller Min cael pensé que habla escuchar mal“, Tür
Desde is muthud, se escucha na buona de Neve Valentina medicina, sin que el señor Mién se atreve a pincharged
que hayas gradus de la facultad de
euenique te
to atravest Realmente, la ignorancia de valor
i
La vida de Paco está en jongs, no podemos seguir esperando Valentina odlaga de plata de la mano de for Milán y la desinfectò de inmediato.
“¿Valentina, estás loca” dijo Nieve, “¿Sabes que si muere por esto, podras terminar en la cárcelt acaben de ser
berada hace unos dias, ¿quieres volver?
Todos quedaron asombrados por sus palabras, fijando su mirada en Valentina, que estaba afroditada frente a Face
La chica bajó la mirada, nadie podia ver la expresión en su rostro en ese momento, solo podían ver su mano que sostenia la aguja plateada temblando ligeramente.
Como si de repente se diera cuenta, Nieve rápidamente se disculpo, Lo siento, Valentina, no quise decato a propósto Solo tengo miedo de que te metas en problemas, fue un impulso del momento, realmente no fue intencional
Las lágrimas brotaban de los ojos de Valentina. Sin girar la cabeza, podia imaginar las expresiones de las personas
presentes.
Primero, shock y sorpresa, seguido de desprecio y burla.
Desde el dia que fue a prisión, sabia que tendría que vivir con esa mirada el resto de su vida.
Valentina, conteniendo las lágrimas, se volvió hacia Maximo, su voz ahogada llevaba un ruego obstinado, “Quivers
intentario”.
Si no lo intentaba, no habría ninguna oportunidad, la vida de Paco podría acabar asi!
¡El aún es joven, no debería dejar este mundo de esta manera!
Maximo, saliendo de su desesperación y sorpresa, al ver los ojos de Valentina, asintió firmemente, “intentalo sale mal, no te culparé“.
Valentina desvió la mirada, tomó una profunda respiración, y una vez encontró el punto, clavó la aguja firmemente
El señor Milán observó asombrado cada uno de sus movimientos, “¿Cómo…….?”
Nieve, viendo la expresión del señor Milán, mostró una sonrisa de satisfacción.
Parecia que esta noche ese niño molesto iba a morir, y Valentina caería con él.
Qué estudiante de medicina más destacada, si causaba una muerte, su carrera estaria definitivamente acabada,
Pensar que pronto Valentina estaría en la calle, despojada de todo, convertida en un paria, le llenaba de un placer
extremo.
Valentina terminó de administrar la inyección, mirando nerviosamente a Paco, que seguía inconsciente
Nieve, acumulando emociones, comenzó a hablar entre lágrimas, “Pobre niño, se fue así nomás, Valentina, es tu culpes! Un niño tan pequeño muriendo en tus manos, ¿cómo puedes vivir con esto encima? Si fuera tu, me iria con él, para expiar mi culpa con la muerte”
La Sra. Ortega, con dolor de cabeza, dijo, “Nieve, ¿podrías hablar menos?
Nieve, secándose las lágrimas, deo. “Sra Ortega, al igual que usted, realmente me duele ver partir al niño, por eso do
la verdad
La Sra Ortega la miró, “El padre del niño ya dijo que no culpará a l