Chapter Capítulo 25
Capítulo 25
Alejandro frunció el ceño, rápidamente asociando los hechos, “¿La golpeó alguien de Maximo Quintana?”
Maximo, aunque aparentaba ser amable y cortés, no era fácil de tratar.
“Si, me he informado. El hijo de Maximo Quintana está ingresado justo en la sala de al lado, parece que tuvo un desencuentro con Nieve.”
Alejandro soltó una risa fria. Así que Maximo queria meterse en sus asuntos.
Se atrevió a llevar a Valentina a cenar
Y ese momento en que su hijo y ella iban de la mano, cualquiera pensaría que eran una familia feliz.
“Sr. Nortes, ¿qué hacemos ahora? le preguntó el secretario.
¿Acaso necesitas que te lo diga?” le respondió Alejandro con frialdad. “Ya que a Maximo le sobra tiempo para cenar, hagamos que no tenga tiempo para eso.”
El secretario estaba confundido.
¿No estaban hablando de que a Nieve le habían pegado?
¿Cómo fue que pasaron a hablar de cenar?
Viendo que Alejandro estaba de muy mal humor, no se atrevió a preguntarle más, “Entendido.”
Después de cenar, Paco insistió en ir al parque de atracciones, y Maximo no tuvo más remedio que llevarlo.
Valentina los acompañó y juntos disfrutaron de todas las atracciones, ella misma se relajó como hacía tiempo no lo hacía.
Hacía mucho que no se sentía tan feliz como ese día.
No fue hasta pasadas las nueve de la noche que los tres regresaron.
Paco estaba tan cansado que se quedó dormido sobre el hombro de Maximo.
21 2 2 2 2 >=
Al volver al hospital, Valentina cambió de ropa a Paco y lo arropó bien, justo cuando iba a salir, abrieron la puerta de la habitación.
Valentina no reconoció de inmediato a la persona en silla de ruedas, “Nieve?”
El rostro de Nieve estaba tan hinchado que parecia un globo, lucia golpeada pero graciosa a la vez.
“¿Qué te pasó?”
“¡Tienes la descaro de preguntarme qué me pasól, Nieve estaba furiosa, “Valentina, ustedes, esta pareja de traidores, se atrevieron a vengarse de mi. Ya le conté a Alejandro, y él no los va a dejar en paz!”
Valentina frunció el ceño, “¿De qué estás hablando?”
Justo cuando Nieve iba a responderle, una enfermera entró corriendo y la llevó consigo, “Disculpen la interrupción, ya me la llevo.”
“Fui yo quien mandó a golpearla.” Maximo intervino, “Ella se metió con mi hijo, tenía que pagar por eso.”
Valentina mostró preocupación, “Sr. Quintana, está bien que quieras vengar a Paco, pero me preocupa que esto te traiga problemas.”
Nieve era la persona que más quería Alejandro, y él no se iba a quedar de brazos cruzados,
Apenas terminó de hablar, el teléfono de Maximo sono.
Después de colgar, le dijo a Valentina, ‘Parece que conoces bien a tu espos0
Valentina frunció el ceño, “Alejandro ya tomó cartas en el asunto, ¿verdad?
Si,y con bastante fuerza, Maximo conrió, “Me sorprende que haga todo esto por una mujer
Capitulo 25
Valentina sintió un amargor en el corazón y sus ojos se llenaron de lágrimas.
Su propio esposo defendiendo a otra mujer con tanto empeño, para ella, era una humillación.
Maximo notó la tristeza de Valentina, “¿Estás bien, Valentina? Lo siento, no debi haber dicho eso.”
“No dijiste nada malo, es lo normal, porque tú no conoces la relación que hay entre ellos.” Valentina se repuso un poco
y le preguntó, “Sr. Quintana, ¿esto se va a complicar? ¿Qué vas a hacer ahora?”
“No te preocupes, puedo manejarlo, solo necesito algo de tiempo y energia. Pero estaré más ocupado, así que necesitaré tu ayuda con Paco.”
“Soy la cuidadora de Paco, así que cuidarlo es mi responsabilidad. No te preocupes, haré todo lo posible por él.”
“Gracias.
Valentina se despidió de Maximo y salió del hospital.
Al subirse a un taxi, el teléfono de Rafael sonó.
Valentina contesto de inmediato, “Tio.”
A través del teléfono, lo que se escuchó fue la voz irritada de Mariana, “Valentina, ¿no dijiste que apenas te mudaras de mi casa, Alejandro dejaría de hacernos la vida imposible? Ya ha pasado una semana, y no solo que no he recibido el aviso para poder abrir la tienda, sino que hoy me llegó una noticia bomba“.
“¿Qué noticia bomba, tia?”