Receta para robarle el corazón al Dr. Farel

Farel se quedo en silencio por un momento antes de forzar una sonrisa. —¢ Qué
significa eso?—

Evrie se apoyaba en el oscuro pasillo, levantando la vista hacia los edificios que
la oprimian con su sombra, tan negros que no se distinguia ni un rayo de luz.
—Tienes razon, quinientos mil por una persona es una ganga.—

Su voz sonaba hueca, sin rastro de emocion.

Farel fruncié el cefio, intentando decir algo mas, pero antes de que pudiera
reaccionar, ella ya habia colgado.

Vestido con un cémodo albornoz, se recostaba en el sofa de cuero, repasando
en su cabeza la llamada que habia recibido esa tarde.

Los gritos agudos de maldiciones, el ruido de lucha y su voz profunda y sombria
contrastaban marcadamente.

Desde aquel incidente con el borracho, habia cambiado en secreto el nimero de
emergencia en su teléfono por el de él mientras ella dormia.

No esperaba que fuera Util tan pronto.

Parecia que habia servido de mucho.

Si no hubiera sido por su llamada de hoy, ella podria estar en peores
condiciones.

Aunque ahora tampoco parecia estar mucho mejor...

Evrie oy6 ruidos en el pasillo y corri6é con su teléfono en mano, chocando con un
doctor que salia de la sala de emergencias.

—Doctor, (como esta mi mama?—

—La paciente se intoxicé severamente, aunque ya le lavamos el estémago, hay
muchas toxinas absorbidas. No podemos tratarla aqui, necesita ser trasladada a
un hospital grande en la capital. —

El médico le extendi6 una hoja. —Apurate con los tramites de traslado.—

¢lIr ala capital?

iEso seria Alnorter!

Evrie se quedé paralizada un momento, firmé rapidamente el formulario sin
pensar en nada mas.

—Contéactate con algln hospital grande en Alnorter, a ver si pueden recibir a la
paciente. Tenemos que ir esta noche si queremos salvarla.—

Al oir al médico, una persona cruzé la mente de Evrie.

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Solo podia ser él.

Con el teléfono en la mano, marco rapidamente el nimero de Farel y fue directa
al grano.

—Dr. Farel, te ruego que me ayudes... Mi mama necesita ser trasladada, tiene
que ir a un hospital grande de la capital esta noche para ser salvada, no tengo
otra opcion, por favor ayuda.—

Del otro lado hubo un silencio de dos segundos y luego la voz fria del hombre
respondio.

—Entendido, lo organizaré.—

—Gracias, muchas gracias...—

Evrie no esperaba que él accediera tan facilmente. Agradecida y sin saber qué
més decir, se preparaba para colgar cuando escuché unas palabras bajas del
otro lado.

—Evrie, me debes un favor.—

Ella se quedé congelada y luego apretd el teléfono con fuerza. —Lo sé, lo
recordaré.—

La ambulancia llegé a Alnorter esa misma noche y con los arreglos de Farel,
Marcela fue rapidamente ingresada en la UCI.

Evrie, que ya habia adelantado algo de dinero para el tratamiento médico, solo
pudo pagar unos pocos miles, prometiendo el resto para el dia siguiente.

Como Evrie habia estado frecuentemente en el hospital por trabajo, el director la
conocia y accedié a esperar.

Evrie se sentd en un banco afuera, paso la noche y el dia siguiente alli. Oscar
salié a comer y, aunque no le caia bien, le trajo un par de bocadillos.

Al mediodia del siguiente dia, Marcela finalmente despert6.

La herida en su mufieca no era profunda, solo necesitaba eliminar las toxinas de
Su cuerpo.

Pronto, Marcela fue trasladada a una sala comun y recobré plenamente la
conciencia. Pero al abrir los ojos y ver a Evrie, no pudo evitar torcer el rostro con
rabia.

—iMaldita, es tu culpa! jCasi arruinas este matrimonio! Vuelve y pide disculpas a
esa familia, jtienes que casarte con éll—

—Mama, ¢todavia piensas en casarme a estas alturas?—

—Si se pierde mi dinero del preparativo de la boda, jprefiero morir aqui en el
hospitall—

Evrie sabia que su madre estaba fuera de si, respiré hondo y con una mirada
fria y sarcéstica le pregunt6.

—¢Entonces, si consigo quinientos mil puedo comprar mi libertad y me dejaras
en paz?—

Marcela solt6 una risa fria. —Hazlo si puedes.—

—De acuerdo.—

Evrie respondi6 con decisién y con una sonrisa en los labios agregé: —Entonces
espera. —

Dicho esto, se dio la vuelta y salié del cuarto sin mirar atras.

—Mama, ¢crees que ella puede conseguir el dinero?— Oscar pregunté con
escepticismo.

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—Vamos, no tiene ni un centavo, ya la
exprimi hasta la Ultima gota. Ni

juntando préstamos podria sacar esa
cantidad de dinero. Tranquilo, va a

volver arrastrandose—. The content

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—Mama, ¢cémo se te ocurre beber veneno para ratas asi como si nada? Casi
me muero del susto— se quejé Oscar.

—No tienes que preocuparte. Le eché agua al veneno. Solo parece peligroso,
pero no mata, yo tengo mas vidas que un gato—.

Marcela estaba tumbada en la cama del hospital, despreciando todo a su
alrededor con la mirada.

¢£ Como iba a conseguir que Evrie cediera si no usaba ese truco?

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Esa nifia terca solo se doblegaba con

la suavidad, se habia vuelto una

pedante tras unos afos de estudio, y

lo que mas temia era la manipulacion
moral. The content is on

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Era ese maldito sentido del deber moral lo que queria usar para atarla bien y no
dejarla escapar.

¢ Qué importancia tenia una hija? No era mas que una maldicién, mientras que
un hijo era la joya de su corazon.

La noche cafa y todo Alnorter se sumia en las sombras.

Evrie, en un acto inusual, tomé un taxi y se dirigié hacia el Barrio El Magnético.
Pas6 su tarjeta, pulsé el botén del ascensor, salid.

Finalmente, Evrie se par frente a la puerta de Farel y alz6 la mano para tocar a
la puerta.

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Farel, recién salido de la ducha con el
cabello goteando, se encontraba en

su bata blanca abriendo la puerta

con pereza, cuando vio a Evrie de pie
afuera. The content is on

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Antes de que él pudiera decir algo, ella se adelant6:

—Quinientos mil, y me tienes a mi.