Chapter Capítulo 77
Capitulo 77
Cuando Elia termino de hablar, se preparé para salir.
Orson ech6 una mirada a Asier, su cara tensa y su mirada profunda.
El hombre se rio a carcajadas y dijo:
“;Quién dijo que no necesitamos tu vino? Ven, sirve una copa a Asier”,
Elia se detuvo y se giro.
Mir6 a Asier, con su expresion indiferente, su actitud tranquila, ni siquiera le dirigié una mirada.
Elia pensé que, tal vez estaba siendo demasiado sensible, Margarita solo queria que vendieran vino.
Después de todo, no fue a trabajar alli para promocionar vino y ganar dinero?
Abrié la botella de vino tinto y sirvié en la copa de vino de Asier.
Mientras tanto, Jimena también abri6 una botella de vino tinto y sirvi6 a los otros tres.
La dama que Orson dejo se senté junto a él, vestida de manera reveladora, se apoyaba en él.
Orson no solo no la rechazd, sino que puso un brazo alrededor de su cintura, la llevé a su regazo y ri 6.6.
Jimena mir a los dos actuando de manera intima, muy disgustada. Mientras miraba a Orson y a la c
El vino tinto se derramo de la copa y fluyé sobre la mesa.
Asier frunci6 el cefio y dijo con disgusto: “Viniste a hacer un lio? jQué molestia!”
La voz de Asier era imponente, fria e impresionante, Jimena se asusté tanto que la botella de vino tir
Fue a parar a los pantalones de los cuatro hombres sentados al borde de la mesa.
Asier aparto las piernas, miré el vino en su cuerpo, su rostro frio como el hielo
Jimena estaba en panico, su rostro enrojecié de miedo, a punto de llorar, continuamente pedia discu
Estaba completamente desconcertada.
Las venas en la cara de Asier se hinchaban y parecia a punto de estallar de furia.
Elia reaccion¢ rapidamente, inmediatamente tomé una
servilleta para limpiar el vino en su cuerpo: “Sr. Griera, no se enfade, ella realmente no lo hizo a prop
Elia estaba ansiosa por apaciguar la ira de Asier, sus movimientos se volvieron apresurados.
A mitad de camino, de repente sintié que algo no estaba bien.
Se detuvo bruscamente.
Levanté lentamente la cabeza, vio los ojos profundos de Asier, sus labios cerrados y sus mejillas tem
Su expresion parecia querer castigarla en el acto.
Se sobresalté y levant6 las manos en sefal de rendicién: “Si digo que no fue intencional, ;me creeria
La cara de Asier se oscurecié y apreto los dientes: “; Td qué crees?”
Los demas los observaban, la batalla que estaba a punto de estallar, ya la chispa ambigua ardia en
Orson con una mano alrededor de la dama y la otra sosteniendo una copa de vino, tenia los ojos lle
La situaci6n era cada vez mas emocionante
Rayan y Vicente tomaron servilletas por su cuenta, mientras limpiaban el vino de sus cuerpos, sonre
-Su principal interés reciente era ver los escandalos de Asier, en especial la version en vivo.
Jimena mir6 a su alrededor, estaba en un aprieto, no sabia qué hacer y via a Orson abrazando a otr
Orson conocia mejor a Asier, al ver que la situacién estaba a punto de salirse de control, inmedia
Vicente y Rayan entendieron el motivo, ambos abandonaron rapidamente el lugar.
Cuando Orson se preparaba para salir con la dama, vio que Jimena todavia estaba parada alli, se
Jimena estaba asombrada, Orson habla tomado su mano.
Dios mio, su piel tocé la de Orson por primera vez, ese latido, como si no fuera suyo.
Elia se dio cuenta de que todos se habian ido, se levanté apurada, dispuesta
a cambiar su incomoda postura actual.
Pero se levanté muy rapido, debido a su habitual malnutricion, se levanté de golpe, sintiéndose mar
Asier sinti6 de inmediato su suavidad.
Como una nube suave, golped su pecho.
Su deseo reprimido se dispar al instante, su garganta tensa, su sangre hirviendo.
Elia se dio cuenta de lo que habia hecho, su corazén comenzo6 a latir mas rapido, sus manos empujat
mufiecas, gird y la hizo sentar de espaldas sobre él.
El corazon de Elia latia mas rapido, comenzo6 a latir como un resorte, se puso nerviosa e inquieta.
"Sefior Griera, ;qué esta haciendo?” Intenté escapar asustada, pero fue rodeada por su largo brazo,
La fuerza del hombre era tal que ella no podia luchar contra él
"¢Qué quieres que haga?”
Su rostro caliente rozé su mejilla, Elia se sintié débil, cada vez mas asustada.
"Sefior Griera, deje de jugar. Lucho con fuerza.
"Si te has lanzado a mis brazos. ;por que finges ser tan distante?” Asier la envolvi6 firmemente, su vc
“No, eso fue.”
“La vida aqui es emocionante, ;verdad? Entonces jugaré contigo hoy..."
El poderoso aroma de Asier roci6 su cuello.
El cuello era su punto més débil, al ser estimulado por ese poderoso aroma, todo su cuerpo temblé
Asier sinti6 su cambio, su garganta dejo escapar un leve grufido: “Tu reaccién corporal es muy real.”
Elia se tenso cada vez mas, cada vez mas asustada, luchando constantemente: “Sefior Griera, usted n
Ella era suave, su piel delicada como la seda, tan familiar y adictiva.
Asier ya no podia distinguir quién era ella
"Esa botella de vino tinto, estaba preparada especialmente para mi, jverdad?” Su voz baja cayo, la er
mirada aténita, la beso apasionadamente.
Su respiracién pesada ocupé todo su aliento, su beso, como una conquista.
Elia todavia tenia algo de razén, pero pronto, sintié dificultad para respirar, su
mente estaba confusa y sin fuerzas, relajé todos sus musculos.